Cada año la Semana Mundial de la Lactancia Materna une a la OMS, UNICEF y otras organizaciones en torno a la promoción de los derechos que deben cobijar a las familias. Para este 2023, el corazón de la discusión fue “Amamantar y trabajar: ¡hagamos que sea posible!, un llamado a la acción que le recordó a las madres la importancia de reflexionar sobre la calidad y cantidad de tiempo que se debe dedicar a la lactancia.
Como pauta general, la OMS considera que como mínimo la lactancia materna debe durar seis meses, recomendando que esta sea la alimentación exclusiva en los recién nacidos. Pasado este periodo y para dar comienzo a la alimentación complementaria, la Dra. Nancy Bernal -Pediatra experta en Lactancia Materna, docente del programa de Pediatría de la Fundación Universitaria Ciencias de la Salud y pediatra del Hospital Infantil Universitario de San José- recomienda integrar
proteínas, grasas y carbohidratos a las comidas de los infantes.
La leche materna no solo proporciona todos los nutrientes necesarios para crecer y que el sistema inmunológico se desarrolle plenamente, sino que también se encarga de brindar la hidratación necesaria al bebé y previene complicaciones como infecciones gastrointestinales y respiratorias, alergias, colesterol alto, además de enfermedades más graves como infección por COVID-19, leucemia o cáncer infantil.
Así mismo, se relaciona la lactancia materna con la disminución de hasta el 60% de riesgo de mortalidad en el primer año de vida, el desarrollo cognitivo a largo plazo y el coeficiente intelectual.
Atendiendo todos estos beneficios, se considera propicio que la etapa de lactancia continúe al menos hasta los dos años de edad. Aun así, la relación madre-hijo, que el mismo acto de amamantar fortalece, marcará la duración en cada caso, que puede llegar incluso a extenderse de manera natural hasta los 4.5 años/6 años de edad, de acuerdo con la Dra. Bernal.
Además de fomentar el vínculo afectivo, la madre podrá obtener múltiples beneficios al amamantar, que van desde una rápida recuperación tras el nacimiento, disminuir el riesgo de sangrado y anemia, prevenir la depresión post parto, quemar calorías y recuperar el peso que se tenía antes del embarazo, hasta prevenir enfermedades como la osteoporosis, diabetes tipo II o el cáncer de mama y ovario.
Asimismo, se suele asociar el periodo de lactancia con algunos beneficios anticonceptivos naturales. Pese a todos estos beneficios, existen mitos que pueden afectar cómo y cuánto tiempo quieren amamantar las madres. Entre los más conocidos se encuentran las experiencias familiares previas de madres o tías que tuvieron problemas durante su lactancia, pensar que no se tiene la capacidad de producir suficiente leche o considerar que los senos flácidos son señal de que no hay una buena alimentación para el bebé.
- Cementerio de barcos en Panamá puede ser una oportunidad para el surgimiento de la vida - diciembre 12, 2024
- Ecuador sumó más de 88 mil hectáreas de bosque nativo a proyecto de protección - diciembre 12, 2024
- Buscan protección para las mariposas Monarca en Estados Unidos - diciembre 12, 2024