Hoy en día no sólo basta con brindar una remuneración a fin de mes para tener colaboradores motivados. En ese sentido, contar con un espacio laboral agradable para los equipos, que brinde beneficios y donde cada miembro se sienta apreciado y retribuido, hace la diferencia a la hora de atraer y retener el mejor talento humano.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) destaca que las políticas y medidas que apunten a mejorar la salud mental de los colaboradores tienen efectos importantes en ellos y la productividad (Informe “Salud Mental en el Trabajo” 2022). Por eso, en el marco del Día Internacional de la Felicidad, Juan Carlos Peñaloza, Country Manager de WeWork Colombia y Costa Rica, entrega siete consejos para que las organizaciones, de todos los tamaños y sectores, sepan qué estrategias implementar para construir espacios de trabajos felices:

Política de puertas abiertas: Uno de los puntos más importantes es tener canales de comunicación abiertos.“La mera posibilidad de tener una comunicación cercana y contar con los espacios para esto, motiva a los trabajadores, ya que es una certeza de que pueden hablar sobre cómo se sienten y, al mismo tiempo, estar predispuestos al feedback. Esto permite generar relaciones de largo plazo”, indica Peñaloza, quien agrega que “al final del día, nuestro capital humano es el corazón del negocio y si el trabajador no está bien emocionalmente, no va a trabajar correctamente”.

Apostar por el desarrollo de talentos: Es importante tener en cuenta que el colaborador quiere sentir que se está invirtiendo en él y su desarrollo profesional, por ello, una manera de beneficiar a la empresa y al trabajador es contar con programas de capacitación y formación contínua. Educar a los trabajadores en áreas variadas como liderazgo, inglés, uso de herramientas tecnológicas, incluso, en competencias de cómo hacer mejor su trabajo (gestión de tiempo y otros) es una inversión siempre.

Establecer una estrategia de “grupos de comunidades de empleados”: Una forma de garantizar que todos los colaboradores se sientan representados y parte activa de la empresa, es con los “Employee Community Groups” o grupos de comunidades de empleados, una herramienta ampliamente usada en las grandes empresas a nivel mundial, para una escucha activa y la promoción de espacios de participación dirigidos a grupos específicos como padres, migrantes, mujeres, miembros de la comunidad LGBTI y otros. Esto promueve la expresión de inquietudes e integración en un ambiente de confianza.

Flexibilidad de horario y lugar: Esto no es nuevo, la pandemia sirvió para establecer los esquemas flexibles de trabajo como una realidad. Este factor aporta en la felicidad instantánea de los trabajadores, pues moverse entre diferentes lugares de trabajo (sea la casa o la oficina) y, además, en horarios más libres, permite hacer un mejor match entre la vida laboral y la personal.

Código de vestimenta flexible: Cuando no sea necesario un código específico de vestuario para los objetivos de la empresa, siempre es bueno evaluar liberar estas condiciones. “Hay que considerar que vestirse formal implica un gasto adicional para los colaboradores, por lo que, poder ir a trabajar sin tener que cumplir con esas exigencias, muestra flexibilidad y desestresa los ambientes”, precisa Peñaloza. De ser necesario cierta vestimenta o, incluso, si es necesario el uso de un uniforme, siempre será recomendable evaluar días más flexibles, como los tradicionales “jeans days” o “viernes casuales”.
Mujeres y hombres con hijos con mejores beneficios: Adicional a todo lo legal, puede ser altamente apreciado por los colaboradores hombres contar con beneficios especiales cuando han sido padres. Y es que compartir con los hijos recién nacidos con mayor libertad, definitivamente, aporta a la felicidad de las personas. También es clave transmitir flexibilidad para madres y padres, en términos generales.

¿Mascotas en la oficina? ¡Excelente idea! Este punto ha sido implementado en algunas empresas, tras la pandemia de Covid-19 y sin dudas es algo que aporta a un ambiente más feliz. “Es muy gratificante ver un perro o un gato en la oficina, aunque no sea tu mascota, al mismo tiempo que acariciarlos o jugar con ellos entre un trayecto y otro, permite liberar estrés”, detalla Pañaloza. Un efecto similar al estímulo que ya generan factores instalados por años, como los días libres por cumpleaños, los días progresivos de vacaciones, el beneficio de jardínes infantiles y sala cunas, entre otros.

Planeta Sostenible
Síguenos

Pin It on Pinterest