La prefectura de Ishikawa, situada en la franja occidental del centro de la isla de Honshu en Japón, fue el epicentro del reciente terremoto que ha causado notables daños y todas las víctimas registradas hasta el momento, según las autoridades locales.
Las localidades de Wajima, con 27,000 habitantes, y Suzu, con 14,000, se han convertido en el foco principal de atención para los equipos de rescate, ya que han pasado 72 horas desde el sismo de 7.6 grados, un período crucial para encontrar supervivientes bajo los escombros. El primer ministro japonés, Fumio Kishida, ha instado a realizar «el máximo esfuerzo» para localizar a posibles supervivientes en esta región.
En Wajima, se han reportado 48 fallecidos y 36 desaparecidos, mientras que en Suzu, 23 personas han perdido la vida y 32 aún están desaparecidas. Los desafíos de acceso son evidentes, con aproximadamente 750 personas en estos dos municipios aún incomunicadas debido a la destrucción de carreteras y caminos causada por el terremoto.
Se ha desplegado un navío militar con maquinaria pesada en Wajima para iniciar la reparación de las vías. Los expertos advierten sobre posibles réplicas intensas durante la próxima semana, y las lluvias actuales en la zona podrían provocar deslizamientos de tierra, complicando aún más las tareas de rescate.
Hasta el momento, el número de heridos en Ishikawa supera los 300, y alrededor de 34,000 personas se encuentran en centros de evacuación en toda la prefectura, donde se estima que más de 200 edificaciones colapsaron.
El hecho de que el terremoto ocurriera el 1 de enero, cuando muchas personas se encontraban en la región para celebrar el Año Nuevo con sus familias, ha aumentado el número de evacuados más allá de las estimaciones normales, y se informa de escasez de alimentos, agua y ropa de abrigo en algunos refugios.
Hasta el jueves, unos 2,000 efectivos de las Fuerzas de Auto Defensa, así como 22 aviones y ocho barcos, han sido desplegados en la región para actividades de rescate e información de daños, el doble de los recursos iniciales. El Gobierno japonés ha anunciado el uso de aproximadamente 4,000 millones de yenes (alrededor de 28 millones de dólares) de fondos de emergencia para aumentar la ayuda en Ishikawa, incluyendo el incremento de los efectivos de las Fuerzas de Auto Defensa a 4,600.
El terremoto, de magnitud 7.6, tuvo su epicentro a 30 kilómetros al noreste de Wajima y es el más devastador en Japón desde el ocurrido en 2016 en la prefectura de Kumamoto. Además, es el primero de nivel 7 registrado en el país desde 2018. La Agencia Meteorológica de Japón (JMA) considera que en un temblor de rango 7 es imposible mantenerse en pie.
A pesar de la alerta por tsunami activada, este evento es el primero de esta magnitud desde el trágico terremoto de 2011 que generó el tsunami en el noreste del país. Este último provocó más de 20,000 muertes y la fusión parcial de reactores en la central nuclear de Fukushima Daiichi, marcando uno de los peores desastres atómicos desde Chernóbil en 1986.