La reducción de la deforestación en un 29,1 % para 2022, como lo reflejan cifras del Ideam anunciadas por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, es un avance crucial en la lucha contra una de las mayores amenazas ambientales para el país y la región.
En Colombia, cerca del 30 % de las emisiones totales de gases efecto invernadero provienen de la deforestación, por lo que esta disminución es una ventana de esperanza hacia el cumplimiento de las metas climáticas nacionales suscritas a nivel internacional, además de un avance por salvaguardar la riqueza biológica en uno de los países más biodiversos del planeta.
Desde WWF Colombia destacaron la estrategia que reconoce los bosques como sistemas socio-ecológicos, en los que se pone en el centro a las comunidades; estas, en articulación con las autoridades ambientales y las organizaciones de la sociedad civil, abordan esta problemática desde la valoración y aprovechamiento sostenible de los bosques, con iniciativas productivas que son el sustento para muchas familias en los territorios, y que inspiran mejores relaciones entre sociedad y ambiente.
Y pese a que las cifras en los departamentos amazónicos, al igual que en los Parques Nacionales Naturales, son alentadoras, nuevos focos en Chocó y Antioquia exigen esfuerzos sustanciales para contener y revertir la pérdida de bosques. De ahí que la concertación e implementación de acuerdos con las comunidades locales para la preservación, restauración y uso sostenible de sus territorios sea el camino hacia una transición al desarrollo sostenible.
La financiación aún es un reto local, nacional e internacional, y por ello diferentes instrumentos financieros como el pago por servicios ambientales (PSA) y el impulso de emprendimientos productivos basados en el uso de la biodiversidad, entre otros, pueden ser efectivos para asegurar la implementación de los acuerdos en el tiempo. El fortalecimiento de capacidades técnicas, administrativas y de gestión ambiental para las comunidades, en conjunto con la disposición de información del estado de los bosques y sus amenazas, deben ser premisas para la toma de decisiones, con la participación de todos los involucrados en la solución de conflictos socioambientales.
WWF Colombia seguirá acompañando acciones en territorio para frenar la deforestación de nuestro país, por el bienestar de la relación sociedad-ambiente. Este trabajo solo es posible en coordinación con las autoridades territoriales, ambientales y organizaciones sociales, y con la ciencia como base y las comunidades como prioridad.