Las aguas del Pacífico Oriental que van desde México y América Central hasta el extremo sur de Chile son una de las regiones más ricas en especies de ballenas. Por ello, especialistas de diez países de Latinoamérica (México, Guatemala, El Salvador, Nicaragua, Costa Rica, Panamá, Colombia, Ecuador, Perú y Chile) se reunieron del 10 al 13 de mayo en un taller presencial en Bogotá, Colombia, para identificar acciones de conservación en el Pacífico Oriental. Esto en el marco del proyecto ‘Corredor azul del Pacífico Oriental’, que hace parte de la Iniciativa para la Protección de Ballenas y Delfines de WWF.
El proyecto regional busca identificar soluciones regionales colectivas para asegurar la conservación de estos grandes cetáceos y llamar a los gobiernos y otros actores involucrados a tomar medidas.
El encuentro contó con la participación de las oficinas de WWF de Guatemala, México, Ecuador, Perú, Chile y Colombia, que fue el anfitrión. En este espacio, hablamos con Yacqueline Montecinos, coordinadora del proyecto ‘Corredor Azul del Pacífico’ y coordinadora de Biodiversidad marina y Políticas oceánicas de WWF Chile; Fernando Félix, consultor para dicho proyecto, y Eduardo Najera, coordinador de Paisajes marinos en WWF México. Aquí nos cuentan sobre la importancia de los corredores azules, las amenazas que enfrentan las ballenas en la región y lo que viene para el proyecto.
¿Cuál es la importancia de los corredores azules para las ballenas?
YACQUELINE MONTECINOS: Las grandes ballenas no se mueven solo por las costas de Colombia, Ecuador o Chile. Son especies que se mueven en extensiones tremendamente grandes, desde la Antártica o el sur de Chile hasta arriba a las áreas de Galápagos o las costas de Panamá. Esos son los corredores marinos que necesitan, por ejemplo, una ballena azul para cumplir con sus necesidades energéticas y sus actividades de alimentación y reproducción. Por eso, son necesarios esfuerzos colaborativos entre los diferentes países para asegurar su
conservación dentro de todo el espacio de distribución que involucra el corredor marino del Pacífico para estas especies altamente migratorias.
Según el informe ‘Protegiendo los corredores azules’ de WWF que se lanzó a principios de año,
¿Cuáles son las principales amenazas que enfrentan las ballenas en el Pacífico Oriental?
YACQUELINE MONTECINOS: Tenemos grandes problemas con la pesca incidental que es la principal causa de muerte de cetáceos alrededor del mundo. Esta interacción negativa entre las pesquerías y las especies afecta tanto a la fauna como a dichas actividades económicas. Ademas, la segunda causa de muerte en el mundo y en el Pacífico son las colisiones con embarcaciones debido al tráfico marino.
Acerca de la situación de las poblaciones de ballenas en la región, ¿cuál es el diagnóstico?
FERNANDO FELIX: Muchas de las especies de ballenas del Pacífico Oriental afectadas por la caza comercial de ballenas en el siglo XX, por ejemplo, los cachalotes, las ballenas azules y las ballenas jorobadas, se están recuperando. Sin embargo, el incremento del esfuerzo pesquero y naviero se está convirtiendo en un problema que se incrementa con el tiempo. También está el caso de las especies que no se han recuperado o que se han recuperado a medias, por lo cual, cualquier amenaza puede afectar su recuperación, ese es el caso de las ballenas francas.