La trombosis es una enfermedad causada por coágulos de sangre o trombos que obstruyen o ralentizan el flujo sanguíneo en un vaso arterial o venoso. Por lo general es una enfermedad evitable y en ese sentido, el 13 de octubre se conmemoró el Día Mundial de la Trombosis como un mecanismo para llamar la atención del mundo sobre los efectos de los coágulos de sangre y su impacto en la mortalidad de la humanidad, un problema de salud pública que cobra la vida de una de cada cuatro personas en el mundo, según cifras de la World Thrombosis Day.

Como las principales enfermedades cardiovasculares más mortales relacionadas con trombosis están el infarto de miocardio, el ictus tromboembólico y la tromboembolia venosa (TEV), esta última en Estados Unidos y Europa, mata cerca de 300.000 personas al año, muchas más que el SIDA, el cáncer de mama, el cáncer de próstata y los accidentes automovilísticos combinados.

“La trombosis puede ser venosa o arterial, dependiendo donde se origina el coagulo, pero estos dos tipos de afección tienen su origen en factores de riesgo adquiridos o heredados como, por ejemplo, la movilidad reducida, los antecedentes médicos familiares, las cirugías, algunos tipos de cáncer, la obesidad, fumar, el uso de medicamentos a base de estrógenos o la función cardíaca y pulmonar limitada producto de cardiopatías”, indicó Claudia Albarán, Gerente Médico de Trombosis en los países COPAC de Sanofi.

Dentro de los principales signos de alerta de la trombosis venosa profunda están inflamación, dolor, sensibilidad al tacto o enrojecimiento de la piel en la extremidad afectada. Por otro lado, la embolia pulmonar se puede manifestar con dolor en pecho, dificultad para respirar, taquicardia y en casos severo puede amenazar la vida. Es indispensable tener presentes los síntomas para diagnosticar y tratar de manera óptima estas afecciones.

Pero, quizá la forma más importante de luchar contra la trombosis es la prevención, los profesionales de la salud recomiendan llevar un estilo de vida saludable y realizar actividad física frecuente. Para aquellos pacientes que se encuentren en una condición de mayor riesgo pueden recibir como tratamiento medicamentos anticoagulantes, siempre y cuando se tenga prescripción médica.

“Es importante tener en cuenta que la trombosis es un evento en salud evitable, por eso se hace indispensable que se adelanten procesos pedagógicos que ayuden a las personas y a los profesionales de la salud a reconocer los factores de riesgo, así como los signos y síntomas asociados de forma temprana para evitar complicaciones y en el caso que corresponda instaurar el tratamiento adecuado con medicamentos idóneos y de calidad para el manejo de estas enfermedades, logrando así un abordaje integral de acuerdo a las necesidades de los pacientes.”, puntualizó Albarán.

Planeta Sostenible
Síguenos

Pin It on Pinterest